¡Hola-la dolces!
Perdón por la ausencia de estos días, pero sin querer queriendo me he metido en una de proyectos estas semanas que me tienen un poco desbordada.
Para compensar os traigo un postre para San Valentín. Y hablando del amor o del día del amor os digo por qué todos los días lo son en villa dolce.
Mr Dolce viaja bastante por trabajo. Mientras redacto este post, va camino de otro destino que nos separará durante días. No quiero ni contarlos porque al final siempre son más (si cuando os digo que voy a escribir el libro de: «La mujer del ingeniero, espera y acierta» no es broma).
Entonces tenéis que entender que cada vez que está en casa es una fiesta. Aprovechamos y disfrutamos cada momento, cada instante, todos los días que pasamos juntos lo vivimos por ese y por los que nos estamos perdiendo el uno del otro.
Así que; ¿Os creéis que vamos a guardar nuestras fuerzas sólo para el 14 de febrero que muchas veces ni lo pasamos juntos? Obvio que no. Hoy ha sido 14 de febrero, he preparado esta crema de frambuesa y hemos apurado las horas hasta casi arrancarlas del reloj para que dejaran de contar.
Ingredientes para 2 personas:
150 g de frambuesas, 150 ml de nata para montar, 25 g de azúcar glacé, 30 g de azúcar, 4 quesitos, frambuesas y grosellas para decorar
¡Manos limpias y a cocinar!
En el vaso de la batidora, colocamos las frambuesas limpias junto con el azúcar y los quesitos y trituramos bien. Colocamos en las copas o vasos donde vayamos a servirlo y dejamos enfriar en la nevera.
Por otro lado, montamos la nata bien fría con el azúcar.
Colocamos la nata en una manga pastelera y decoramos las copas con ella.
Terminamos adornando con las frambuesas y las grosellas al gusto. Podemos incluir también unas hojas de menta para decorar.
¡Disfrutad, besos y abrazos very very dolces!
Oh, Mery, qué duro tiene que ser estar separados… Pero bueno, como bien dices, exprimiréis al máximo cada momento juntos… La crema tiene que estar muy rica y los colores son súper sanvalentineros…
Un besito!
No lo sabes bien, la procesión va por dentro que se dice. Muchas gracias preciosa, besetes!
Son preciosas Mery y súper facilitas, me encantan. Ánimo con esas ausencias!!
Besos guapa.
Muchas gracias preciosa, un abrazo gigante!
Ostras Mery, te entiendo perfectamente! En mi caso, era yo el que viajaba por trabajo constantemente, y aunque cada viaje suponía un nuevo reto y era muy estimulante a nivel laboral, a nivel personal es muy duro. Por suerte tuve la oportunidad de ‘establecerme’ y en cuanto pude así hice. Así que me parece fantástico y la mar de normal que aprovechéis al máximo las ocasiones que teneis de ‘arrejuntaros’, claro que sí! Y qué mejor manera de hacerlo que con esta crema tan y tan rica que nos traes…
Besotes guapa!
P.D.: Que no me entere yo que vuelves a Barcelona y no me dices nada!
A Fran le pasa lo mismo, está encantado con su trabajo por muchas cosas,sobre todo por todo lo que está aprendiendo, pero al parte fea es el estar separados. El en unos años seguramente también pueda hacer lo mismo, pero nos quedan aún unos añitos de suplicio. Mua!!!
Es una penita que viaje tanto, pero lo llevas como una campeona.
Así cada momento que paséis juntos, como dices, será especial ^^
Con esta cremita de frambuesa se perdona la ausencia 😉
Un besote guapa!!
No nos queda otra guapi, tenemos que llevarlo lo mejor posible 🙂 Gracias preciosa, besitos!