¡Hola-la dolces!
Que difícil se pone cuando a alguien no le gusta algo de comer. Por ejemplo, Mr. Dolce y el pescado son una eterna lucha, o eran. Poco a poco se lo he ido introduciendo y consiguiendo la manera de que vaya tomando algunas cosillas. Por suerte, el bacalao es uno de los pescados que más le gusta, así que tengo que tener varios ases en la manga para preparárselo y no se canse de siempre lo mismo.
Me encantó cuando hace unas semanas en Masterchef se fueron a Lisboa y prepararon dos recetas que yo no había probado: Bacalhau à Brás y Bacalhau Espiritual. Con toques parecidos, pero nos convenció más el Bacalhau à Brás para prepararlo y menudo acierto. Otra receta que ya se queda en casa, maravillosa.
Ellos suelen usar el bacalao desalado que es el ingrediente principal del plato, pero yo quise hacerlo como lo hicieron en Masterchef con el bacalao fresco que lo prefiero.
Ingredientes para 4 personas:
1 kg de bacalao fresco en trozos, 4 yemas de huevo grandes, dos cucharadas de nata para cocinar (opcional), 1 cebolla grande, 2 patatas grandes, sal, sal gorda, aceite de oliva, perejil y olivas negras para decorar
¡Manos limpias y a cocinar!
Lo primero que vamos a hacer es poner en una sartén un chorrito de aceite de oliva y pochamos la cebolla lavada y cortada en juliana con una cucharadita de sal. Cuando la tengamos lista la añadimos a un bol grande.
En un cazo amplio ponemos agua y una cucharada de sal gorda y lo llevamos a ebullición.
Pelamos, lavamos las patatas y las cortamos con una mandolina, robot o rallador las patatas muy finamente (haremos patatas paja) y las colocamos en un bol con abundante agua muy fría para que suelten el almidón.
Freímos las patatas escurridas en abundante aceite caliente en tandas pequeñas para no enfriar mucho el aceite. Cuando vayan dorándose las colocamos primero en un plato con papel absorbente para quitar el exceso de aceite y luego las pasamos al bol junto con la cebolla.
Quitamos del bacalao el lateral que contiene las espinas y lo guardamos para usar en otra ocasión. Cuando el agua hierva, añadimos el bacalao sin espinas al agua y lo dejaremos 5 minutos a fuego medio. Retiramos del agua, escurrimos bien. Le quitamos la piel y desmigamos. Incorporamos al bol también. Por último, batimos las yemas (y agregamos la nata si la fuésemos a utilizar para aportar un poco más de cremosidad) y volcamos en el bol. Mezclamos todos los ingredientes bien y emplatamos como más nos guste. Yo reservé alguna patata paja para adornar junto con las aceitunas y el perejil.
¡Disfrutad, besos y abrazos very very dolces!