¡Hola-la dolces!

La receta de hoy no tiene nada de especial ni nada nuevo, pero es de esas recetas básicas que suelo hacer bastante en casa porque nos gusta mucho y esa es razón suficiente para publicarla.

Reconozco que es una de mis formas favoritas de comer conejo ya que queda tan doradito y crujiente, aparte de que su sabor es mucho más suave de esta forma.

Lo suelo hacer prácticamente como el pollo asado, cambiando el vino por un buen tinto y sólo que en esta ocasión y por la dieta no le puse patata (sacrilegio, I know, con lo rica que está la patata asada en estos platos, más me duele a mí os lo aseguro).

Ingredientes para 4 personas:

Un conejo entero grande limpio y partido en cuartos, 8 patatas medianas, 4 tomates medianos, 1 cebolla grande, 1 vasito de vino tinto rioja, medio vasito de agua, un par de hojas de laurel y un par de dientes de ajo (opcional), un buen chorrito de aceite de oliva, sal, un cucharada de tomillo, pimienta negra molida

¡Manos limpias y a cocinar!

Untamos con aceite el fondo de la bandeja amplia donde lo vamos a preparar e introducimos la cebolla picada en juliana y los dientes de ajo sin pelar y el laurel si los vamos a utilizar. A continuación colocamos las patatas peladas, lavadas y enteras, salpimentamos y por último colocamos el conejo, salpimentamos el conejo, vertemos el vino y el agua sobre el y por último añadimos el tomillo.

Llevamos al horno previamente calentado a 190º calor inferior, ponemos la bandeja un punto por debajo de la mitad y lo dejaremos así una media hora. A continuación, pondremos el horno a 200º calor arriba y abajo y subiremos la bandeja un punto por encima de la mitad y lo dejaremos hasta que esté bien dorado, lo podemos dar la vuelta al conejo para que se dore por ambas caras.

Una vez listo, lo servimos rápidamente.

¿Qué suena en LDG?

Mientras redacto esta parte de la entrada realmente suena Standstill («adelanteeeeee bonaparteeeee», que adoro yo a estos hombres copín), pero el que se ha convertido en tema de la semana es otro.

Hoy un viejo conocido en el mundo indie: Deluxe hace unos años, Xoel López siempre y ahora más que nunca. Creo que está canción es una maravilla, que hay que escucharla despacito y comprender todo lo que esconde detrás de cada palabra. Me emociono ya con los primeros acordes:

Xoel López- Tierra

 

¡Disfrutad, besos y abrazos very very dolces!