¡Hola-la dolces!

Tenía esta receta en el baúl desde hace casi un año. Siempre tengo algunas recetas que voy guardando para usar más adelante y luego por unas cosas u otras parece que nunca salen a la luz.

La mayoría de las veces no es porque sean recetas que no hayan quedado ricas, la mayor parte es porque al final el resultado de las fotos no me termina de convencer y al final quedan ahí condenadas y muchas de ellas nunca verán la luz a no ser que las repita.

Lo que no sé es por qué he dejado esta receta tan rica y bonita en el cajón por tanto tiempo. Seguro que vosotros tampoco lo vais a entender cuando la veáis.

Ingredientes para 4 personas:

400 g. Macarrones (en este caso yo usé integrales)
2 Pechugas de pollo en dados
1 Cabeza de brócoli
1 Diente de ajo
Sal y pimienta negra
Aceite de oliva
1 cta. Harina de trigo
150 ml. Caldo de pollo
200 ml. Leche desnatada
Parmesano rallado al gusto

¡Manos limpias y a cocinar!

1. Cocemos la pasta en agua salada hirviendo y siguiendo instrucciones del fabricante. Escurrimos y reservamos una taza del agua de la cocción. Por otro lado, cocemos también el brócoli limpio en agua salada y en trocitos durante sólo 3/4 minutos, queremos que quede «al dente».

2. En una sartén con un chorrito de aceite salteamos la pechuga salpimentada con el ajo. Cuando esté dorada la pechuga por todos lados, retiramos y reservamos.

3. Aprovechamos esa misma sartén para añadir un par de cucharadas más de aceite, tostamos la harina, salpimentamos y añadimos el caldo de pollo y la leche poco a poco hasta formar una especie de bechamel ligera.

4. Agregamos el pollo y la pasta y el queso al gusto y removemos bien.

5. Añadimos agua de la cocción hasta que quede una salsa bien cremosa y servimos. Añadimos el brócoli que teníamos reservado para finalizar el plato.

Espero que os haya gustado esta receta y la preparéis. Un abrazo very dolce.

Mery